AVISO DE CONTENIDO
Mientras muchos morían por su obstinación en tratar de conseguir otro tipo de combustibles fósiles, nuestra pequeña pero decidida comunidad en medio de las montañas, al parecer oculta ante los ojos del mundo, no se resignó a perder la esperanza.
Hoy conmemoramos lo que llamamos “Dia de La Memoria”. Ya son 210 años desde que nuestros primeros colonos fundaron Komunumo de Espero. Orgullosamente, puedo contarles que las dos pioneras de todo este proyecto contaban con habilidades increíbles que usaron para hacer crecer la comunidad que quizá hoy sea la piedra angular de la salvación de la tierra.
Elodia es la madre de todos nosotros. Fue la creadora y gestora de nuestra comunidad. Ella no tenía ningún tipo de experiencia en gobierno o dirigiendo empresas; en las fotos y videos que tenemos de ella en su juventud nos encontramos con una chica curiosa e inteligente, pelirroja con unos rizos de encanto y sus ojos color miel parecían gotas de ámbar. Era una joven talentosa que se había dedicado a tiempo completo a la botánica.
Su conocimiento era incomparable, resultado no solamente de su paso por la universidad, sino también de su profunda curiosidad en los saberes ancestrales de las herbolarias del siglo XVIII. Para la mayoría de los habitantes del año 2210, pensar que el conocimiento del año 1700 podría tener alguna validez hubiera sido una locura.
Con mucho trabajo y dedicación, logró conseguir algunos ejemplares originales de recetas medicinales para diferentes dolencias. Antes del colapso, Elodia recorrió el mundo buscando semillas de los ingredientes más importantes, con la única meta de mantener vivas estas hierbas y alimentos, que ella consideraba como parte de la salvación de muchas personas cuando los procesos productivos no pudieran continuar por la falta de combustibles.
Su pasión por la botánica solo fue el primer paso de su idea de Komunumo; ella sabía que necesitaba crear un espacio donde pudiera desarrollar un colectivo con múltiples habilidades, que les permitiera sobrevivir al caos que preveía iba a sufrir la tierra.
Estaba absolutamente convencida de que cuando el petróleo se terminara el mundo iba a colapsar. Tuvo una visión apocalíptica del porvenir durante uno de sus periplos por la selva del Amazonas, donde los chamanes de Mayantuyacu la guiaron en un viaje místico con ayahuasca.
Su visión mística la llevó a un mundo que moría rápidamente, casi podía tocar con sus manos la tierra árida de lo que era un inmenso lago en su tierra natal. Sentía el sufrimiento de las madres que no podían alimentar a sus hijos porque las cosechas de soya se usaban para producir etanol para mantener las fábricas funcionando mientras los niños morían por desnutrición.
Al volver de su viaje, no se quedó sentada esperando, comenzó en su cuaderno de notas a hacer el esbozo de lo que hoy es nuestra comuna. Su idea original era la creación de granjas sostenibles que estuvieran preparadas para separarse del sistema de consumo de combustibles fósiles. Ella estaba segura de que era posible sobrevivir con las formas energéticas alternativas, como la solar o la geotérmica, si lograba encontrar una ubicación perfecta.
Cuando tuvo una idea lo suficientemente coherente para presentarla al mundo, no tardó en crear una página web para encontrar a quienes serían sus futuros compañeros de lucha por la vida. La respuesta a su idea francamente fue variopinta, desde los supervivencialistas apocalípticos hasta los escépticos iracundos.
La primera reclutada para su equipo fue Violeta. Fue quien bautizó el proyecto como Komunumo de Espero, escogió este nombre en esperanto porque lo primero que pensó al ver la página web es que esta comunidad no podía convertirse en una Torre de Babel y todos debían poder comunicarse para poder mantenerla viva.
Ella era una experta en tecnología y se había formado como ingeniera en energías renovables. Se enroló inmediatamente al conocer la idea de Elodia junto con su esposo Tadeo, un experto ingeniero de sistemas, quien desde hacía muchos años se dedicaba a la seguridad informática.
Los tres, hombro a hombro, reclutaron a cada uno de los hombres y mujeres que dispusieron su tiempo y recursos para crear este sueño, en el cual hemos sobrevivido con una vida tranquila, sostenible y con muy pocos sobresaltos,
Para mí, no solo es un día importante por la conmemoración. Empieza mi primer día como líder de la comunidad, pues en la Asamblea han tomado la decisión de que soy la persona más adecuada para esta nueva etapa. Este honor lo alcancé después de años de estudio y servicio.
—Ana, ven, por favor, el Consejo de Ancianos y los komununeros están en el ágora listos para escucharte— dijo Emilia, la intendenta de la ciudad
—De inmediato, no puedo hacerles esperar, mucho menos hoy— dije dirigiéndome a la plaza en el corazón de la comunidad.
La plaza de mármol que construyeron los pioneros se inspiró en Atenas, en su época dorada de Pericles y allí en el centro me esperaba Emanuel, uno de los ancianos más sabios, descendiente directo de Violeta y Tadeo, uno de los miembros más querido y respetado de la comunidad.
—Komunumo, silencio, hoy nuestra Ana está aquí para presentarnos cuál será el futuro de nuestra ciudad en los próximos años, escuchemos con atención sus palabras— dijo Emanuel frente a más de 50.000 personas que estaban allí presentes y otras 60.000 que acompañaban desde sus casas este evento.
—Gracias maestro, Komunumo querido. Las decisiones que les presentaré no se basan en el ardor del momento, ni en la dicha por alcanzar tan alto reconocimiento, Son resultado de una profunda reflexión sobre nuestro rol en este mundo agonizante. Dentro de los análisis que ha realizado nuestro laboratorio, hemos encontrado una reducción exponencial de la contaminación en los alrededores. Es tan baja que nuestros científicos especulan con una posible extinción de los humanos restantes, yo no lo creo posible. Pero nuestros drones de reconocimiento llevan más de 2 meses en el terreno en búsqueda de ciudades pobladas sin éxito—. indiqué.
—Vamos a enviar un convoy de exploración. Si encontramos humanos y desean venir con nosotros, serán bienvenidos. A partir de hoy, nuestras puertas estarán abiertas— dije. —Daremos cobijo a quien necesite un lugar donde vivir, protegeremos de cualquier amenaza y compartiremos nuestros conocimientos y valores para ayudar a reconstruir la vida en la tierra desde nuestros desarrollos ecológicos y nuestra capacidad de preservación.
Una algarabía retumbó en la plaza, no sé si fue resultado del temor o de la alegría frente a la sensación de libertad, pero la decisión ya era un hecho cumplido. Un acto del cual espero no llegar a arrepentirme.
—Eliana, acércate— dije señalando a mi segunda al mando, la persona en la que más confió y respeto desde hace años.
—Querido Komunumo, esta mujer es la encargada de conectarnos nuevamente con el mundo si encontramos sobrevivientes a estas décadas de contaminación y muerte. Será Eliana quien nos presente la realidad más allá de los sensores y las máquinas. A partir de mañana saldrá nuestra primera misión tripulada en las últimas dos centurias.
Eliana tímidamente se acomodó a mi lado, ella prefería espacios menos concurridos pero sabía que su aparición en público era inevitable. Se acercó y con una breve reverencia tomó el micrófono y comenzó a hablar pausadamente:
— Señora Ana, después de años de vigilancia y de rastreo, los indicios más claros presentan que hacia el norte de nuestras murallas hay un asentamiento con humanos. Hemos podido detectar la huella electromagnética de su equipamiento, pero no ha sido posible entablar comunicación, sus dispositivos y los nuestros no parecen ser compatibles— indicó Eliana.
—Esta autorización para la salida de mi equipo no es una decisión tomada a la suerte, es el resultado de años de trabajo constante, pero ante todo del deseo de ayudar a quienes puedan estar pasando necesidad. Ya hemos superado esa idea apocalíptica inicial de que estamos solos, en este momento estamos seguros de que no es así— dijo Eliana señalando hacia una superficie cubierta por una seda blanca.
—Sun Yi, por favor, muestrales qué encontró nuestro sistema de rastreo— La oficial de mantenimiento retiró la cubierta y tomó en sus manos lo que parecían los restos de un aparato tecnológico,
—Lo que ustedes están observando es un dron de reconocimiento. Nosotros no contamos con ese tipo de tecnología en nuestra comunidad, pero gracias al trabajo del ala de ingeniería podemos determinar que su abastecimiento energético es una nueva generación de fisión atómica—. dijo la oficial.
Al escuchar la palabra atómica de inmediato hubo un sobresalto general.
Incluso yo, cuando recibí por primera vez esta noticia sentí que un escalofrío recorría mi espalda. ¿Sería esto posible? ¿Nuestra madre pudo haberse equivocado y en realidad, aunque se terminó el petróleo la humanidad siguió su proceso en el planeta?
—Komunumo hoy descansa tranquilo, mañana será el primer día de una nueva era, pueden retirarse— dije mientras me aproximaba a Eliana —Ve a descansar, partes a primera hora— dije, dándole un abrazo.
A la mañana siguiente, el convoy compuesto por tres de nuestras mejores ingenieras y dos agentes de seguridad de élite salió de nuestra ciudad con la orden expresa de comunicarse cada seis horas para saber el estado de avance de la misión y su estatus de seguridad.
Los ocho primeros reportes se dieron con puntualidad, pero el noveno, el primero del tercer día, nos dejó petrificados. No tuvimos una transmisión en vivo como en los anteriores, las imágenes que estábamos recibiendo correspondían a unas horas antes, sin lugar a duda en la madrugada.
Mostraba con detalle un laboratorio científico de altísima tecnología y algunas escenas de unos bloques habitacionales. En el minuto quince del video, Eliana, fuera de cuadro, leía unos documentos sellados como clasificados que tomaba de un escritorio. Noté sorpresa en su voz cuando empezó a leerlos:
Elodia Walters, Violeta Peters y Tadeo Benjamin eran considerados sujetos de interés de alta peligrosidad, activistas ambientales y férreos opositores al desarrollo de tecnologías de fisión para solventar el agotamiento de los combustibles fósiles en el planeta. Desde la Crisis del Petróleo del 2005 se han atrincherado con más de 150 personas en las coordenadas 32°29′25″N 51°31′30″W.
La determinación según la ordenanza D—34354— 2005 es la generación de un domo electromagnético en su terreno que impida cualquier posibilidad de relación digital o analógica con su entorno, dejándolos en aislamiento completo.
Se calcula, según las evidencias recuperadas por los drones de reconocimiento, que sus recursos se agotarán en menos de una década y se procederá a la recuperación del enclave.
Eliana giró bruscamente la cámara con la que ha estado grabando la evidencia y dijo perpleja:
—Nunca cuestioné por qué nosotros habíamos podido sobrevivir tan fácilmente y los demás no. Creí ciegamente en las historias que nos trasmitían los mayores sobre la incapacidad del mundo por trabajar unido por una salvación general, Ahora que estoy aquí veo todas las mentiras que sembraron en nosotros— dijo con sus ojos llenos de lágrimas
—Para cuando recibas esta comunicación, Ana, ya estaré de regreso, pero no iré sola, retornare si es necesario con un contingente completo para que puedan retomar el control de Komunumo y se termine con esta farsa. Ana, te quiero y te respeto, pero no opongas resistencia, debemos hacer lo correcto— y la comunicación terminó.
La confusión reinaba en nuestro centro de mando, ¿Cómo podía ser posible semejante revelación? Solo quedaba una cosa por hacer mientras encontraba una explicación a todo esto:
—Cierren las puertas y lleven al Consejo de Ancianos a mi despacho— grité —De inmediato activen todos los escudos de protección, no vamos a permitir que esto se convierta en una masacre—.
Reto #EstrellasDeTinta2023, las normas las encuentras en https://plumakatty.blogspot.com/2022/12/reto-de-escritura-creativa.html
PRINCIPAL: 12− Escribe sobre un mundo en el que el petróleo se haya terminado.
SECUNDARIOS:
Ups, vaya un complot inesperado. Buen relato, buena historia, cumple los objetivos y alguno anual también. Te recomiendo echar un vistazo a la puntuación, deben ser rayas, no guiones y se te cuela algún espacio al comienzo del dialogo varias veces. A parte de algunas comas las comas raras, tienes alguna frase confusa entre las descripciones y los tiempos también confunden. Bien que aprovechas para reivindicar el derroche de recursos en combustible mientras la gente pasa hambre. Me ha gustado como pintas la comunidad, todo amor y el trasfondo postapocalíptico queda muy marcado. Escribes de una forma bastante descriptiva de forma natural, eso esta bien. Como detalle, al mencionar la ayahuasca quizá podrías poner un Aviso de contenido por mencion a drogas, pero es algo ligero. Un saludito
ResponderEliminar.KATTY.
¡Muchas gracias por tu comentario! Pondré manos a la obra para mejorarlo a partir de tus observaciones. Y lo de la ayahuasca se lo agregó, no pensé que le aplicara :)
Eliminar¡Hola, hola!
ResponderEliminarLo mío no es la ciencia ficción o relatos apocalípticos (y sí, tengo ansiedad de cuando me toque escribir esto), así que estoy gratamente sorprendida de que me haya gustado tanto tu historia. ¡Narras muy bien, Marianne! Tu tipo de narrativa es una que me gusta mucho y es muy fácil seguirla. Muy descriptiva y con el tono adecuado como para mantenerte leyendo. Retrataste igual muy bien lo tranquilo y 'perfecto' que es en Konumuno y el desastre fuera. ¡Y vaya final! No esperaba para nada que al final fuesen ellos 'los malos'. Jesús, por eso nunca debes solo creer una cara de la historia. Yo confiada ciegamente en que la vuelta de tuerca iba a ser que los rescatados se volviesen contra la gente del domo y resulta que no. Muy bien trabajada la tensión para explotarla en ese momento.
En ciertos puntos me costo seguir un poco el ritmo, pero fue en las partes donde se explicaba el aspecto 'científico' de la historia, pero eso creo que es más culpa mía que tuya. Igual hay algunas confusiones respecto a los tiempos verbales, pero nada muy grave. A veces solo hace falta dejarle un día o horas de reposo al relato y volverlo a ver con ojos frescos para darse cuenta de estos detalles. Igual ocurre que tenemos una idea muy clara de lo que queremos contar, pero para contarlo nos hacemos un lío.
En fin, ¡besitos! Espero leerte en febrero (o en el micro de enero).
Muchas gracias por tus comentarios, nos vemos en febrero (y en el micro)
EliminarBuenas noches
ResponderEliminarMe paso yo también a comentar. Como soy el tercero, ya hay muchas cosas que ya te han dicho así que no las repetiré (las cuestiones de puntuación de los diálogos, por ejemplo, o que los tres objetivos están muy bien hilados).
El relato me ha sorprendido. La verdad es que parecía que iba a suceder una cosa y luego acontece otra muy diferente. Al principio es un texto muy descrptivo y luego, cuando aparecen los personajes, la historia se vuelve más dinámica. La parte descriptiva, no obstante, era necesaria y se lee rápido y bien.
Me ha gustado lo de komunumo de espero (comunidad de esperanza). ¿Hablas esperanto? Yo lo estudié hace muchos años y me gustaría retomarlo.
Enhorabuena por el relato y un saludo.
Juan.
Muchas gracias. Ya estoy sufriendo con los signos de puntuación, pero creo que será posible mejorarlos. Frente al tema del esperanto, lastimosamente solo lo estudie un semestre, me gustaba mucho, pero no pasamos de ahí, me gusta usarlo en mis historias cuando es posible.
EliminarBuenos días,
ResponderEliminarEspero realizar un buen comentario, ya que no suelo hacerlo por miedo a ofender al escritor. Es un relato que me ha sorprendido, a medida que iba avanzando ya que a lo primero , me perdí en la historia ya que no conseguía entenderla, pero después, sinceramente me ha gustado además del giro del final, no lo esperaba.
En cuanto, a las cuestiones técnicas, creo que te han dicho todo ya, lo único que señalaría que al principio resulta muy largo y algo complicado de entender (por lo menos a mí), pero después comprendes toda la historia.
Mis felicitaciones por el relato, y saludos
Comparto lo que sientes frente a hacer comentarios, me pasa exactamente lo mismo. Pero por lo menos de mi parte, te agradezco por dedicarle un poco de tu tiempo a mi relato.
EliminarHola!
ResponderEliminarLo primero de todo es decir que me resultó un relato muy llamativo con un final aún más sorprendente. Me gustó mucho el uso del esperanto, le da un toque distinto y muy original así como la referencia a los chamanes de Mayantuyacu y la ayahuasca.
El relato se plantea de forma que la historia se presta a un desarrollo mucho mayor con una presentación bien estructurada, un desarrollo con muchos personajes de los que sólo citas su nombre y su ocupación y que no aportan mucho a la trama así como una misión junto a un final, como ya anoté, tan sorprendente como inesperado.
Tiempos verbales:
En algunos momentos narras en pasado y en presente: «Para la mayoría de los habitantes del año 2210, pensar que el conocimiento del año 1700 podría tener alguna validez es una locura».
Redundancias:
"Ella" «ella sabía que necesitaba crear un espacio donde pudiera desarrollar un colectivo con múltiples habilidades, que les permitiera sobrevivir al caos que ella preveía iba a sufrir la tierra»
"De inmediato" «−Cierren las puertas y lleven de inmediato al Consejo de Ancianos a mi despacho – grité –De inmediato activen todos los escudos de protección, no vamos a permitir que esto se convierta en una masacre».
«Las decisiones que les presentaré no se basan en el ardor del momento, ni en la dicha por alcanzar tan alto reconocimiento, es el resultado de una profunda reflexión sobre nuestro rol en este mundo agonizante». Ese «es resultado» debería ser en plural.
¡Me gustó mucho!
¡Un saludo!
¡Muchísimas gracias por tus observaciones! Tanto detalle me permite realmente ver cuáles son mis errores para corregirlos más fácilmente. Te agradezco por tomarte el tiempo para hacerlo.
EliminarSaludos!
¡¡Hola!! Ya he leído tu relato varias veces y de nuevo te doy mi enhorabuena. Es una historia muy elaborada, narrada con mucho detalle y que perfectamente podría ser mucho más larga, espero que continúe ;). El contexto que das es perfecto, aunque para mi gusto lo vería más apropiado para un relato de 5000-10000 palabras, pues en un relato tan comprimido podemos tener la sensación de perdernos en detalles que luego no van a tener su justa relevancia. Luego la historia se dinamiza y nos abandona en un momento crítico que hace que queramos saber más. Mi enhorabuena y con ganas de leerte mucho este año :).
ResponderEliminar¡Gracias! Sin tu apoyo no hubiera logrado siquiera terminarlo, tendré muy en cuenta tus sugerencias para mejorar en cada relato. Espero que los próximos sean mucho mejores.
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